CONCIERTO PARA PIANO Y ORQUESTA

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile
Arta Arnicane, piano, Letonia

El martes 5 de julio a las 19:30 horas, la orquesta dirigida por su maestro titular, Rodolfo Saglimbeni, presentará tres obras con dos grandes compositores alemanes: el Concierto para piano N° 2 de Beethoven, además de dos piezas de Richard Strauss.

El público podrá disfrutar de este programa organizado por el Teatro Municipal de Las Condes, en conjunto con el Centro de Extensión Artística y Cultural de la Universidad de Chile, que trae consigo tres reconocidas obras en la historia de la música docta: Concierto para Piano y orquesta N° 2, en Si bemol mayor, Op. 19 de Ludwig Van Beethoven, junto con Serenata Para Vientos y Don Juan, ambas de Richard Strauss.
El concierto para piano estará interpretado por la solista letona, Arta Arnicane, que se presentará por primera vez junto a la Sinfónica Nacional y que ha destacado en una gran variedad de salas de conciertos alrededor del mundo por su capacidad artística, combinada con el calor e inteligencia de sus programas e interpretaciones.
Por su parte, la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile es la agrupación sinfónica de más larga trayectoria del país, la primera creada como organización estatal permanente y duradera. Considerada Patrimonio Nacional, ha mantenido un alto prestigio por su calidad artística y por su difusión de la música de autores nacionales, clásicos y contemporáneos.
Actualmente está dirigida por el maestro Rodolfo Saglimbeni quien ha sido galardonado con la Orden “Waraira Repano” y la Orden “José Félix Ribas”, además del título honorario ARAM por la Real Academia de Música de Londres. En 2014 fue nombrado por el Gobierno de la República de Italia como “Caballero de la Orden de la Estrella de Italia –Cavaliere – Ordine della Stella d´Italia”, reconocimiento que confiere el estado italiano por los logros adquiridos en el campo de las ciencias, las letras y las artes.

FECHAS / HORARIOS

Martes 5 de julio • 19:30 horas

INFORMACIÓN

Duración espectáculo: 90 minutos sin intermedio
Categoría: Para todo espectador
Disciplina: Concierto de piano y orquesta
Descuento: 15% de descuento, pagando con la tarjeta Club de Lectores American Express El Mercurio, con suscripciones vigente.
Información importante: Todos los menores con sus acompañantes cancelan su entrada al Teatro.

TENER EN CUENTA

• Solicitaremos a todos los asistentes su Pase de Movilidad Habilitado o un resultado PCR negativo realizado en Chile y no mayor a 24 horas, junto con su Cédula de Identidad. Dicho documento será revisado en las puertas de Ingreso al Teatro. Sin este documento no podrás ingresar ¡Considéralo al momento de tu compra!
• Desde el 1 de noviembre del 2021, se solicitará pase de movilidad propio para mayores de 12 años
• ES OBLIGATORIO EL USO DE MASCARILLA DURANTE LA FUNCIÓN

CONCIERTO PARA PIANO Y ORQUESTA

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile
Coro de la Universidad de Chile

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile
Director Titular:
Rodolfo Saglimbeni

Concierto para Piano y orquesta N° 2, en Si bemol mayor, Op. 19 de L. V. Beethoven
Solista invitada: Arta Arnicane (Letonia)

Johannes Brahms (Alemania, 1833-1897)
Canción del Destino Op.54 (“Schicksalslied”)

En su etapa de madurez, Johannes Brahms compuso una serie de obras para coro y orquesta sobre textos de destacados poetas germanos, tales como Nänie op. 82, compuesta a partir de un texto de Friedrich von Schiller; el Canto de las Parcas op. 89 y la Rapsodia para contralto, coro masculino y orquesta op. 53, ambas con textos de Johann Wolfang von Goethe; y por supuesto su Schicksalslied – o “Canción del destino”- op. 54, compuesta en 1871 para coro y orquesta, sobre el poema Hyperions Schicksalslied (“Canción del destino de Hiperión”), de Friedrich Hölderlin (1770-1843).
“Vosotros paseáis allá arriba, en la luz, por el leve suelo, genios celestiales (…). Mas no es dado a nosotros tregua en paraje alguno; desaparecen, caen los hombres resignados (…) como agua de una peña arrojada a otra peña, a través de los años en lo incierto, hacia abajo” escribió Hölderlin. Como indica el académico español Jacobo Zabalo, “la lejanía de los dioses resultó especialmente insoportable para el poeta alemán, que, de este modo, con un sentimiento de fatalidad en apariencia más griego que propiamente judeocristiano, reivindicó sin consuelo una existencia alejada de riesgos. Una existencia exenta de aquellos avatares que conciernen a la condición humana, cuya finitud, tan irrevocable como indeseada, ha sido desde siempre motivo de reflexión y recreación artística”. Es precisamente esta contraposición entre la vida de los hombres y la de los dioses la que Brahms buscó expresar musicalmente, esto luego de tomar contacto con el poema de Hölderlin, hacia 1868.
De las tres estrofas del texto, Brahms construye su obra en base a dos secciones principales. La primera de ellas, de carácter apacible y amable, se despliega en comunión con las dos primeras estrofas de Hölderlin, las que evocan y ensalzan al arquetipo romántico del ‘genio’ (aquel ser ‘inefable’, creativo y sensible). En tanto, la segunda ofrece un gran contraste, sobre todo en términos rítmicos y de intensidad, reforzando el sentido de la tercera estrofa del poema, la que realiza un violento giro temático, lamentándose de la sufriente y ordinaria vida del común de los mortales. Finalmente, una sección instrumental recapitula el material de la primera y es la encargada de producir el cierre de la obra.

Juan Carlos Poveda

Robert Schumann (Zwickau, 1810 – Endenich, actual Bonn 1856)
Sinfonía N° 2 en Do, Op.61
– I. Sostenuto assai. Un poco vivace. Allegro ma non troppo
– II. Scherzo: Allegro vivace.
– III. Adagio espressivo.
– IV. Allegro molto vivace.

Cronológicamente, ésta es la quinta de seis sinfonías que Schumann proyectó y de las que solo terminó cuatro. Aunque no tiene ningún tipo de referencia programática, se la vincula con la lucha del compositor por superar su enfermedad mental, tras los primeros síntomas de ella.
Fue terminada el 19 de octubre de 1846 y estrenada por la Orquesta de la Gewandhaus de Leipzig, bajo la dirección de Félix Mendelssohn, el 5 de noviembre del mismo año.
Todos los movimientos están en Do y, tanto el carácter global como la estructura general y los vínculos temáticos, presentan entre ellos claras reminiscencias beethovenianas. El 1er movimiento comienza con un tema solemne en los bronces (“Sostenuto assai”), que después reaparece en otros pasajes de la sinfonía. El 2º movimiento es un scherzo con dos tríos, donde reaparece el tema de los bronces del movimiento anterior. El 3er movimiento está en Do menor y posee un carácter melancólico, mientras que el 4º movimiento, que muestra un retorno triunfal a Do Mayor, presenta plan sonata y su segundo tema corresponde al tema principal del movimiento anterior.

Fuente: Cristián Guerra –
Concierto N° 6 – Temporada Oficial OSCH – Mayo 2009

Richard Strauss (Alemania, 1864-1949)
Don Juan, op. 20

“Bien sé que la forma es el cuerpo bello e inolvidable de la poesía, la cual es engendrada por obra del espíritu humano; pero entonces, ¿no tendría que haber, además, una revelación intuitiva de la poesía que penetrara en los seres vivos de un modo más hondo, más emocionante y directo, sin límites formales fijos?”.
Las palabras de la escritora Bettina Brentano nos permiten instalar una problemática romántica por excelencia: la cualidad de la música para ‘decir’ cosas que las palabras no son capaces de ‘decir’. Esta idea se configura en el anhelo romántico de romper las barreras y normas establecidas por las concepciones ilustradas del arte, fusionando diversos planos en pos de un ideal expresivo, que solo a partir de la música se podía lograr. Es así como podemos entender el surgimiento del ‘Poema Sinfónico’, el que puede definirse como un género instrumental para orquesta que tiene por finalidad expresar emociones, imágenes o una trama literaria. Generalmente constituido por un solo movimiento, su forma depende en muchos casos de la estructura del texto musicalizado.
Don Juan toma como inspiración la leyenda del hedonista y cruel seductor, quien en sus innumerables conquistas amorosas experimenta una serie de depravaciones y escándalos, sintiéndose finalmente atraído por la muerte, que para este caso constituye una victoria que pone fin a una vida autodestructiva. A partir de esta narración, Strauss transmite escenas de amor, carnaval y, por supuesto, el duelo final que da muerte al protagonista.
La obra fue estrenada en 1889, unas cuatro décadas después del primer poema sinfónico de Liszt, compositor considerado el precursor del género. A pesar de la distancia que Strauss toma del modelo de Liszt – llegando a nombrar sus poemas sinfónicos “poemas tonales”-, éste continúa considerando la imagen poética como un germen esencial: “Si se desea crear una obra de arte cuyo sentimiento y estructura sean de una sola pieza y que haya de producir una impresión vívida en el oyente, entonces el autor (…) debe tener previamente en su ojo interior una imagen vívida de lo que quiere decir. Esto solo es posible como consecuencia de la fertilización de una idea poética incorporada a la obra (…). De aquí en más ya no existirá la composición de frases hermosas pero carentes de objetivo, durante las cuales las mentes, tanto del compositor como de los oyentes, están totalmente en blanco (…)”.

Juan Carlos Poveda

CONCIERTO PARA PIANO Y ORQUESTA

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile
Coro de la Universidad de Chile

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile

La Orquesta Sinfónica Nacional de Chile es la agrupación sinfónica de más larga trayectoria del país, la primera creada como organización estatal permanente y duradera. Considerada Patrimonio Nacional, ha mantenido un alto prestigio por su calidad artística y por su difusión de la música de autores nacionales, clásicos y contemporáneos.

Fundada en 1941, tuvo su concierto inaugural el 7 de enero de ese año en el Teatro Municipal de Santiago, con la conducción de su primer Director Titular, Armando Carvajal. Integrada por más de 90 músicos del más alto nivel, la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile desarrolla una extensa temporada de conciertos con una gran variedad de programas presentados en Santiago y otras regiones del país. Asimismo, extiende su labor de difusión a estudiantes de diferentes sectores.

A lo largo de su historia ha sido reconocida con diferentes premios, como en 1977 por el Círculo de Críticos de Arte de Chile, que le confirió el Premio de Arte en Música; en 1990, el Premio APES al Mejor Grupo Orquestal; en 2001 el Premio de la Academia de Bellas Artes de Chile y en 2009, el Premio del Círculo de Críticos de Arte de Santiago. En 2011 el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes le otorgó el Premio a la Música Presidente de la República, en reconocimiento a su trayectoria de más de 70 años aportando al desarrollo y consolidación de la identidad musical chilena, mientras que en 2016 recibió el Premio del Senado de la República de Chile por su trayectoria y aporte al desarrollo cultural del país.

Su repertorio abarca desde el período Barroco al Contemporáneo, pasando por clásicos universales. Ha estrenado prácticamente la totalidad de las obras chilenas sinfónicas y sinfónico-corales escritas en el país, desde los Festivales Bienales de Música Chilena iniciados en 1948, hasta hoy, en sus temporadas oficiales desarrolladas en el Teatro Universidad de Chile.

Rodolfo Saglimbeni / Director Titular de la Orquesta Sinfónica Nacional

Desde su regreso a su natal Venezuela (1987), se ha convertido en uno de los directores más solicitados del país y de Sudamérica. Estudió en Venezuela y en la Real Academia de Música de Londres, obteniendo su grado con honores, el Diploma de Director de Orquesta y numerosos premios. Alumno del maestro Franco Ferrara en la Academia Santa Cecilia de Roma, fue primer finalista en el Concurso Internacional de Directores de Orquesta de Besancon (Francia), siendo el director más joven de la competencia en la edición de 1985.

Ha sido Director Asociado de la Sinfonietta de Caracas y de la Sinfónica Venezuela, Director Artístico Fundador de la Sinfónica Gran Mariscal Ayacucho y Director Musical del Teatro Teresa Carreño. Invitado de las orquestas de Besançon, Radio/Televisión de Luxemburgo, Haydn de Londres, de las orquestas y ensambles de la Real Academia de Música, entre otras, además de numerosos países de Centro y Sudamérica.

Profesor de la Universidad Nacional Experimental de las Artes UNEARTES, tutor de Dirección de la Orquesta en Fundamusical “Simón Bolívar” y de la Escuela de Música del Mozarteum de Caracas.

En 1997 es seleccionado para la Beca de las Américas, patrocinada por el Kennedy Center de Washington DC. En 1989 fue galardonado como Mejor Director del Año y en 1999 obtiene el Premio Director de las Américas, en Santiago de Chile. Ese mismo año ganó en Venezuela el Premio Nacional del Artista. En 2003 asume como Director Artístico de la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas. En 2015 es designado Director Artístico de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Nacional de Cuyo. En 2019 es elegido Director Titular de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile, cargo en el que es ratificado en 2021 por un nuevo periodo de tres años.

Ha sido galardonado con la Orden “Waraira Repano” y la Orden “José Félix Ribas”, además del título honorario ARAM por la Real Academia de Música de Londres. En 2014 fue nombrado por el Gobierno de la República de Italia como “Caballero de la Orden de la Estrella de Italia –Cavaliere – Ordine della Stella d´Italia”, reconocimiento que confiere el estado italiano por los logros adquiridos en el campo de las ciencias, las letras y las artes.

CONCIERTO PARA PIANO Y ORQUESTA

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile
Coro de la Universidad de Chile

La comunicación con la audiencia, junto con el talento para crear una especial atmósfera de concierto, han destacado a la joven pianista letona, Arta Arnicane, en una gran variedad de salas a través del mundo. Su capacidad para atraer la atención del público, combinada con el calor e inteligencia de sus programas e interpretaciones, le permiten fascinar tanto a pequeñas como a grandes concurrencias en las salas, tales como la Rudolfinum en Praga y la Tonhalle en Zurich.

Nació dentro de una familia con una larga tradición musical. Comenzó a tocar piano y a componer a la edad de 4 años. Ha sido apoyada por numerosas becas y eminentes artistas, como John Lill y Homero Francesch.

Estudió en muchos países, graduándose con distinción en el Real Conservatorio de Escocia (2004), en la Academia de Música de Letonia (2008) y en la Universidad de las Artes en Zurich (2010 – 2012). Sus profesores Sergejs Osokins, Norma Fisher y Homero Francesch influyeron en el desarrollo artístico de su personalidad y la guiaron al ámbito musical internacional.

Ha obtenido muchos premios en concursos internacionales, incluidos el “Vianna da Motta” (2001), premio “Iturbi” (2010) y “Praga Spring” (2011, para nombrar algunos.

Se dedica especialmente a la creación de programas temáticos y narrativos, así como a descubrir e interpretar un repertorio poco tradicional. Su creativa colaboración con el director John Gibbons incluyó interpretaciones de los dos conciertos para piano de William Alwyn y la grabación del potente y expresivo Concierto para piano de William Wordsworth (Toccata Classics, 2019).

Arta es también una entusiasta intérprete de música de cámara y toca regularmente a dúo con su marido, el cellista alemán Florian Arnicans. El reciente álbum “Fairytale”, lanzado por el “Dúo Arnicans”, estará disponible para la venta el otoño del 2022 (Prima classic), seguido de un programa de sonatas de Chopin y E. Dohnanyi, cargado de emotividad y el álbum “Enchanted” (2015 y 2018, solo música).

PLANO SALA

VALORES / DESCUENTOS

Entrada

General

60%

T. Vecino

15% AMEX Mercurio

Platea VIP

$18.000

$7.200

$15.300

Platea General

$14.000

$5.600

$11.900

Silla de Ruedas

$14.000

$5.600

$11.900

Palco Primera Fila*

$14.000

$5.600

$11.900

Movilidad Reducida

$14.000

$5.600

$11.900

* Ubicaciones con vista parcial al escenario.

Julio 5 @ 20:30
20:30 — 21:20

TMLC

Detalles